domingo, 26 de diciembre de 2010

Y después de los villancicos..¿que tal?

Pues más bien mosqueado y con muy poquita ilusión para empezar el Año Nuevo. Porque los que manejan nuestra barca se han ido de vacaciones la víspera de Nochebuen y no piensan regresar a dar la cara hasta el mes de febrero. Sí, lo han leído bien: según sus reglas internas, ajustadas a sus intereses, se toma casi dos meses de vacaciones, y mientras tanto celebrarán algunas reuniones en petit comité, para qe no se diga, salvar la cara y puedan aprobar aquello que les interese bien a la mayoría minoritaria o bien a todos y cada uno de los diputados o senadores inútiles. A saber:subida de sueldos, gabelas, excepción de impuestos, viajes pagados, dietas semipensionistas,kilometraje marino...( y que se me entienda bien cuando digo INÚTILES me refiero al resultado de sus trabajos porque , digan lo que digan la ultima palabra siempre la tiene el Congreso de los Diputados, con lo cual nos podríamos ahorrar un montón de dinero. Por ejemplo, su tan cacareado VETO a los Prepuestos de 2011, donde el PSOE se quedó solo recientemente, no fué sino un brindis al Sol, en un día nublado y aciago, para deleite de periodistas y paniaguados que tienen que llenar diariamente la portada de docenas de medios de comunicación. Y eso duele.

A estas alturas del año nuestro Sistema parlamentario está tan obsoleto como la Organización las Naciones Unidas. Sin exagerar me atrevo a decir que tan solo sirve a los intereses de unos cientos de miles de beneficiados directa o indirectamente. Todo a costa de la inmensa MAYORIA pagana de sus dispendios, ineficencias e ineficacias. Veremos si el Año Nuevo nos trae una brizna de esperanza porque, de lo contrario, si tan solo resulta ser otro Prosp..asable año, habremos dado otro pasito hacia el precipicio. Y eso no sería nada bueno, lo diga Agamenón o su Porquero.

viernes, 17 de diciembre de 2010

¿Habrá otro, para sí, decía, más torpe y tonto que yo..?

Pues eso es lo que se me ocurre a la vista de "las soledades presidenciales" durante el último ECOFIN, cuando podría haber aprovechado la ocasión para tomarse uns Birras con sus coleguillas Angela y Sharko, y entre ¡Chin-chin, prost o salute!, que le hubieran explicado como se las maravillaron para conseguir gobernar en coalición con los socialistas y remodelar la estructura político-económica de los Länders a fin de agiornar aquella gran nación. Ni más ni menos.Y a buen seguro que, si en vez de aparecer por el Congreso de los Diputados, hubiese madrugado y concertado la cita con la citada pareja de mandatarios, a estas horas podrían estar repicando las campanas, incluso las del clausurado Valle de los Caídos, con una semana de adelanto sobre la Nochebuena. Ni las dos tardes le hubiesen hecho falta. Y un servidor hubiese tenido, seguramente, la tentación de pillar una cogorza incluso de cava catalán.
Vivir para ver. Y seguimos estando a niveles de la EGB. Porque ese es el tipo de problemas que nos acucian. Aquellos que puede entender cualquier niño o niña, Infante o no, a partir de los 7 u ocho añitos de edad.