¡Niñas (y niños), al salón!

La temida Crisis arrecia, cual huracán in crescendo, y a nuestros gobernantes no se les ocurre otra cosa que cubrir las ventanas clavando malamente chapas de hojalata ya muy usada.

Los actores de Primera se han inmolado en la pira funeraria de Dom Jose Luis Rodriguez, ( el zapatero que no se dedica a sus zapatos). Y el pobre Rub_Al-Kaba multiplicándose en todos los frentes para tratar de clarificar o enderezar los diques y despropósitos de sus compañera/os de Gabinete.

Pero la tormenta arrecia y no atinan a pararla con los primeros espadas. Han tocado a arrebato para que los vermellones, aidas, garÇones, ..y otros especimenes de la amplia familia socialista pongan la cara para que se la vayan partiendo, que para algo cobran. Y muy bien por cierto. Y de paso ganamos segundos preciosos a ver si suena la campana y les salva la nube de tinta barata que estamos levantado.

Pues eso, que el viejo grito de guerra de los inmuebles más o menos prohibidos y frecuentados desde que el Mundo es Mundo, ha vuelto a resonar con más intensidad que nunca en las cavernas y despachos enmoquetados de Moncloa y Ferráz "¡Niñas, al salón!".