viernes, 21 de diciembre de 2007

Presupuesto habemus. Pero descuadrado y cuesta abajo.

Como estaba cantado, el Gobierno del Sr. Rodríguez ha sacado adelante los Presupuestos del año 2008. Con la ayuda de todo el rojerío y mediopensionistas/tránsfugas. Por los pelos. Pero ahí está. Con desajustes o inconsistencias, de unos 200 y pico de millones de euros: vale, pero eso se arregla con “dos martillazos” según el argot contable. Liquidado, pero, menos. Y lo decimos porque no nos cuadra que la autoproclamada Octava Potencia Económica del Mundo, faro de Oriente y pilotillo de Occidente, sea capaz de aprobar y comprometer una cifra enorme de gastos, cuando sabe a ciencia cierta que sus previsiones de ingresos, según las estimaciones del mes de septiembre, no se van a cumplir ni de lejos. (Y casualmente hoy mismo se han publicado las ultimas estimaciones a la baja del Centro de Estudios del Banco de Bilbao). O sea: que los gastos son inalterables, y cualquier afectado negativamente por su mayor o menor incumplimiento podrá protestar, si no hay dindero para todos, pero se tendrá que aguantar, mascará en silencio su engaño. O bien, si se quiere contentar a todos cuantos se pudieran ver afectados por la escasez de los ingresos previstos, no habrá más remedio que subir los impuestos a mitad del Ejercicio, con el consiguiente mosqueo y cabreo del personal. Sinceramente, no suena cualquiera de las dos situaciones a timo, o estafa electoralera, al menos?. ¿Permite esto la Constiución española?. ¿Y la Jurisprudencia del Tribunal europeo de la Haya o el de Luxemburgo?. Se me espabilen, please.

Rogaría que alguien de los que puedan leer estas líneas nos confirmen el planteamiento o duda o bien lo rebatan si estamos equivocados.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sugiero que a partir del día 8 de enero se abra una línea de debate, sobre los Presupuestos recien aprobados, entre los dos principales Partidos de la Oposición.
Propongo que en esos dos meses, hasta el dia de las Elecciones, se desmenucen punto por punto ante los ojos de los ciudadanos con la opción de poder ser televisados y retransmitidos, incluso solamente radiados, por todos aquellos Operadores o cadenas de emisoras que lo deseen.
De esta forma los electores podremos saber a que carta quedarnos al disponer de una información fresca y contrastada.

Propongo que para este excepcional evento se cuente, como moderadores, con profesionales experimentados como el Señor Balbin, de memorable recuerdo con su excepcional programa "La Clave".