Punto y seguido

Ya tenemos La sentencia, pero en términos taurinos, seguimos en España, con "división de opiniones". No podía ser de otra forma.

Esta sería mi breve, pero sincera, aportación al inacabado, exagerado y dislocado debate en los medios de comunicación sobre la sentencia del juicio celebrado con los mimbres de la "extravagante" investigación e instrucción del Sumario llevada a cabo por el Juez del Olmo tras los terribles atentados del 11 de Marzo de 2003.

Entiendo que se ha realizado un trabajo excepcionalmente complejo con unos resultados aceptables. Ahora tan sólo cabe continuarlo para tratar de aclarar, sin prisas, pero sin pausas, aquellos puntos o aspectos fundamentales que no han podido quedar establecidos o demostrados con las pruebas aportadas, puntos que indudablemente interesarán a una Sociedad democrática sana, moderna y deseosa de conocer toda la verdad.

Dicho esto, y a título personal, sugiero que se abra una línea de investigación, quizás varias, lo antes posible, para delimitar responsabilidades en el lamentable, y por otra parte fundamental, asunto del extraño, anormal, atípico, increíble... desguace de los trenes, destrozados por los explosivos, a las 48/72 horas de cometidos los atentados. (Porque, ¿existe algún precedente en los Anales de la ciencia juridica ate un hecho tan grave?. Si así fuera, convendría concretarlo.)

Deberíamos conocer con todo lujo de detalles tanto los nombres de todos cuantos fueron algo más que meros ejecutores instrumentales de tales trabajos (limpieza a fondo de pruebas esenciales) como los procedimientos o protocolos de actuación seguidos durante aquellas largas horas y aciagos dias.